Como siempre el horario no me acompañaba, y no podía esperar a las 9 para coger un ferry que me llevase por el naeroyfjord, además de caro, unos 90 euros, dura unas dos horas. Por lo que se me ocurrió fue recorrer en carretera los rincones de este fiordo. Después de dejar Flam cojo los túneles en dirección a Gudvangen. Una pequeña advertencia, quien tenga miedo a los túneles que no vaya a los fiordos, allí un túnel de menos de 3-4 kms ni se considera así, porque muchas veces ni están iluminados, lo normal son túneles de 4 a 12 kms. Mi primera parada es Undredal, esta pequeña aldea de aquí arriba que da al fiordo patrimonio de la humanidad, se supone que su iglesia es famosa, pero estaba en obras y a mi me pareció una ermita, lo mejor sin duda es el paisaje.
Para terminar con este fiordo hay que volver por la carretera hasta la principal seguir por los túneles, al llegar a Gudvangen, en el puerto, a la izquierda sale una pequeña carretera que se adentra en el fiordo varios kms entre granjas, esto es con lo que me tuve que conformar.
Todo lo anterior ya me lo esperaba, ya lo llevaba mas o menos visto, lo que no sabía lo que me iba a deparar era el resto de la jornada, una muy larga jornada, por lugares no tan famosos de los fiordos. El recorrido entre Gudvangen y Voss es precioso, increíble, lleno de bosques, lagos y cascadas. Pero merece una mención especial Stalheim, una pequeña aldea cercana a Gudvangen de la cual tuve noticias por azar, después de ver cientos de páginas en alguna en inglés decía que estaban bien las vistas. No le hace justicia.
Esta vista es desde el Hotel Stamheim, y esto en directo te deja sin palabras.
Para subir a Stalheim hay una carretera con túneles, sin embargo, sigue estando la antigua carretera de montaña Stalheimskleiva, yo la encontré detrás del hotel, si quieres puedes a aventurarte a ir con el coche, pero no se lo aconsejo a nadie, da escalofríos los desniveles alrrededor del 20 por ciento de desnivel, el coche puede sufrir ahí mucho. Lo que hace la gente, y lo que hice yo es bajarla andando, ya que vas hasta dos importantes cataratas, Sivlefossen y Stalheimsfossen.
Una vez bajado el puerto, la carretera se estabiliza en un falso llano hasta llegar a Voss entre alguna catarata, bosques y lagos, todo ello siguiendo el río donde encontré mucha gente practicando descenso en kayak.
Tvindefossen
Voss es la ciudad mas grande de la zona, y con un entorno para pasar el día, desgraciadamente yo tenía que ir a toda leche.
Una de las atracciones de Voss es bordalsgjelet gorge, un cañon adaptado para pasear por el, aunque espectacular se me hizo muy corto para el trayecto que hice hasta Voss para ver esto, menos mal que el recorrido es precioso.
Para seguir mi camino tengo que volver sobre mis pasos para coger la carretera 13, una carretera mas bien desconocida pero con grandes contrastes, este primer tramo tiene el nombre de Vikafjellsvegen, la cual sube las montañas para bajar hasta el fiordo.
Bajando hacia Vik desde las montañas hay un restaurante con este espectacular mirador, storesvingen.
Esta iglesia es hopperstad, en la localidad de Vik. La siguiente parada es Vangsnes, donde tengo que coger mi primer ferry, para ello sigo la carretera que bordea el fiordo unos 20 kms.
Para montar en el ferry, cuando llegas al puerto hay carteles como los que hay en las autovias, y te pones en la cola del cartel que muestre tu destino, en mi caso era Dragsvik (Balestrand). Cada media hora mas o menos llega el ferry, sale alguien que va cobrando que suele ser de 9 a 15 euros, que para un turista es muy barato comparado con lo que cuesta todo ahí, y a continuación te dirijen dentro del ferry, normalmente de dos plantas.
Se supone que no puedes bajar del coche, pero todo el mundo, o por lo menos todos los turistas bajamos y nos ponemos a hacer fotos, esto no se ve todos los días, además, los ferrys tienen wc, y siempre hay que aprovechar los baños gratuitos, porque en muchos sitios te cobran un euro y medio, aunque si eres avispado te lo ahorras, parando en gasolineras, areas recreativas, los supermercados coop y los propios ferrys.
Me quedan otros 20 kms bordeando el fiordo antes de que la carretera se interne otra vez en la montaña.
Ahora la carretera 13 se llama Gaularfjellet, que tambien me llevará a cruzar otra cadena de montañas.
La siguiente atracción que hay es Likholefossen, esta catalogado como catarata, pero la verdadera atracción es el sendero que no es mas que un paseo de 1 hora en total y el puente que cruza el río.
El resto del camino hasta Forde, mi lugar de destino, se desarrolla entre lagos y pueblos agrícolas, tambien todo muy bonito, pero yo ya solo tenía en mente llegar para dormir, el día de hoy ha sido muy largo.
El hostel de Forde quizá sea de los menos visitados, sin duda para mi fue de los mejores, estaba solo en el albergue, para que me atendiesen tuve que llamar a un número de telf. que había en recepción, como pude me entendí en inglés con la señora y en 10 min estaba allí, el precio es el mas barato de todos, la habitación la encuentras a 150 noks, unos 20 euros en hi hostels, el desalluno no entra, pero lo pido alli por 60 noks creo, son baratos los desallunos para lo que es noruega, además, como dirían en mi pueblo, te puedes hinchar.
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